El estadio tiene una capacidad superior a los 65.000 espectadores, y diversas fuentes cercanas a la organización, bajo condición de anonimato, advirtieron que menos de 20.000 tickets habrían sido vendidos. Si bien la FIFA niega esa cifra y asegura que la demanda es “mucho mayor”, hasta el momento no ha brindado datos oficiales que desmientan el panorama.
La FIFA bajó hasta un 84% los precios de las entradas para el partido inaugural del Mundial de Clubes entre el Inter Miami y Al-Ahly: por la baja demanda, pasaron de costar US$ 349 a US$ 55. Esta reducción significativa busca captar la atención de los hinchas y evitar que la imagen del estadio semivacío empañe la presentación del torneo.
¿El Mundial de Clubes no atrae a nadie en Estados Unidos?
El modelo de precios dinámicos que adoptó la FIFA, basado en la oferta y la demanda, terminó exponiendo el desinterés por los encuentros menos atractivos. El organismo esperaba que la presencia de Messi y su Inter Miami funcionara como gran imán para la apertura, pero el impacto parece haber sido menor al anticipado.
El clima en Miami, sumado a la elección del rival, un equipo africano con escasa convocatoria en Estados Unidos, podría haber conspirado contra una mayor expectativa. En una declaración oficial, la FIFA intentó llevar tranquilidad: “Estamos presentando a muchos clubes nuevos y exitosos al mundo a través de este torneo, que se jugará en 11 ciudades de Estados Unidos. En general, anticipamos grandes convocatorias a los estadios en toda la competencia”.
Pese al optimismo, el desafío para llenar las tribunas parece tangible. Inter Miami se clasificó al Mundial de Clubes tras ganar la Supporters’ Shield de la MLS en 2024. Su calendario de fase de grupos incluye también partidos ante Porto (con entradas desde US$ 58) y Palmeiras, en el duelo más convocante, cuyas entradas arrancan en US$ 113.
La FIFA apuesta a que el interés crezca a medida que avancen los partidos y lleguen los enfrentamientos con equipos de mayor tradición. Por ahora, la imagen de un estadio semivacío en la jornada inaugural podría ser un golpe simbólico para el ente madre del fútbol mundial, que apuesta fuerte a esta nueva versión del torneo como su producto estrella para los próximos años.